Family Search

La mejor base de datos a nivel mundial en genealogía es https://familysearch.org/  Concretamente en el caso español contiene infinidad de registros e incluso enlaces a las imágenes de los libros que sustentan dichos datos.

La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días es quien patrocina en último término dicha base de datos aunque en principio está disponible para todo usuario. Su afán ha sido recorrerse el mundo a la búsqueda de todo dato genealógico que se les haya querido proporcionar desde las distintas entidades, muchas de ellas de ámbito religioso, y a veces con un coste económico importante por dichas operaciones.

Para el caso español su principal fuente ha sido acudir a los libros sacramentales (bautismo, matrimonio y defunciones) de la Iglesia Católica. Y en cada provincia han procedido según ha querido acceder el obispado correspondiente:


  •             Hay provincias que han permitido la microfilmación en los años 80 de los libros sacramentales de la provincia, y a continuación su publicación libre en la web de family search, como puede ser el caso de Albacete, Ávila, Barcelona, Cantabria, Ciudad Real, Gerona, Murcia, parte de Salamanca (correspondiente a la diócesis de Ciudad Rodrigo). Esto facilita su acceso online desde cualquier ordenador, permitiendo su uso a cualquier hora y desde cualquier lugar sin tener que estar restringidos al horario de cualquier archivo. Incluso algunos de estos fondos están enlazados con su base de datos, de forma que usando su buscador nos puede dar señas de los datos registrados y desde allí acceder a la imagen correspondiente para terminar de ver todo el apunte completo, lo cual es una gran ventaja.


  •             Por último hay otras provincias que han considerado que no se prestaban a este tipo de convenios con Family Search, hecho que explica que no aparezcan datos de las mismas en su buscador. Incluso en este caso encontramos actuaciones en todos los sentidos, desde los que permiten un acceso muy reducido a los libros sacramentales hasta los que se han montado su propio buscador provincial.
Family search también recoge para el caso español otros archivos municipales, en cuyo caso abundan más provincias, aunque en este caso el inconveniente es que no suelen alcanzar tanto período de tiempo, pero evidentemente todo es una ayuda en la investigación. Para ver todos los fondos españoles disponibles puedes acceder a: https://familysearch.org/search/collection/list#page=1&countryId=1927167

Como resulta patente después de este repaso no hay una unidad de actuación ya que los agentes no son los mismos y no hay una unidad de criterio. Aquí nos encontramos con dificultades burocráticas o de concepto sobre la utilización de estos fondos. Hay fondos que con el paso de los años se han perdido, y no se van a encontrar ni aquí ni en ningún otro lado. Pero también se ha dado ya el caso que alguno de estos fondos que sí que se microfilmaron en los 80 se han perdido posteriormente por incendios de las iglesias, y gracias a la microfilmación conservamos al menos sus imágenes.

Luego resulta otro problema la cuestión del uso de la base de datos y los criterios de indexación. La base de datos se crea en principio a partir de voluntarios que leen dichos libros y transcriben lo que leen. Concretamente el proceso es que dos voluntarios transcriben independientemente cada apunte y un tercero arbitra en el caso de que existan errores o diferencias entre las transcripciones.

Y esto que como es obvio siempre se hace con la mejor de las voluntades en algún momento no es lo más eficiente. En nuestros libros más antiguos por ejemplo son muy abundantes las abreviaturas, de forma que puede aparecer que se casa Jº Gª con Mª Mrn lo cual si se transcribe literalmente a la base de datos no le va a servir a casi nadie porque nadie va a buscar ese texto sino Juan García y María Martín. Una indexación eficiente haría que la base de datos contuviera este último texto y no el primero, pero a veces no ocurre y encontramos transcripciones muy defectuosas del texto escrito en el papel, lo cual dificulta su uso. En muchas ocasiones el motivo es que ni siquiera conocen el castellano los que hacen la base de datos de forma que no saben si lo que están escribiendo tiene sentido.

Una buena indexación requiere no sólo conocer el idioma y las abreviaturas, sino incluso las costumbres del lugar: concretamente respecto a la ordenación de los apellidos encontramos distintos usos a lo largo del tiempo en las distintas provincias españolas, y la preferencia del apellido del padre sobre el de la madre en tierras castellanas no se sigue al menos tan estrictamente en la zona gallega, o el uso del apellido del marido por la mujer que regía en ciertas zonas.


Pero no deja de ser una gran ventaja disponer de esta base de datos, con todos sus errores, ya que en otro caso una búsqueda podría llegar a ser dificultosa. Por ejemplo, por mucho que la costumbre antigua fuera  que la boda se celebrara en el pueblo de la novia esto no se cumplía siempre (en particular si se trataban de viudas) y ponerse a buscar por los libros de todos los pueblos de alrededor es como buscar una aguja en un pajar; pero gracias a la base de datos nos podemos encontrar con la ubicación exacta del hecho, de forma que podemos ir a tiro fijo a buscarlo al libro correspondiente. Todo un lujazo.

Puedes ver su uso en la práctica en los siguientes vídeos:







Compuesto por Ursicino Carrascal


Genealogía para principiantes: cómo empezar del todo

Todos hemos tenido en algún momento la inquietud por saber de dónde procedemos. Y en esta entrada quiero contaros cómo empezar con ello para...